lunes, 10 de julio de 2017

La paz, promovida desde los videojuegos





Las iniciativas buscan informar de manera interactiva sobre el posconflicto en Colombia.

Un juego en el que las víctimas tienen la oportunidad de conocer en detalle las leyes de reparación. Esta es una de las ideas que forman parte de una colección de videojuegos con los que se pretende dar a conocer, de una manera interactiva, cómo ha transcurrido el proceso de paz en el país.
Vitimalz, Reconstrucción.co y Paz a la Voz son algunas de las iniciativas creadas por desarrolladores e investigadores que fueron convocados por el Ministerio de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (Mintic) y la Unidad de Víctimas.

Para la creación de los videojuegos, los desarrolladores realizaron distintas pruebas en colegios de zonas rurales y urbanas. Carlos Sandoval, quien participó en la creación de Reconstrucción, comenta que “durante el proceso de prueba se evidenció que un videojuego no cambia una estructura mental o conductiva frente al conflicto, pero sí genera una percepción distinta, apoyada en valores”.

También se hizo evidente que la efectividad de los videojuegos es mayor cuando estos sirven como apoyo a las cátedras de paz que cuando se utilizan como elementos aislados. Por ejemplo, el grupo encargado del proyecto Reconstrucción también realizó documentales para reforzar las ideas que querían promover.

Según Ana Echeverri, una de las desarrolladores de Paz a la Voz, estas herramientas digitales aportan en el camino de la construcción de la paz. “Los videojuegos logran conectar de una forma más cercana y emotiva a los usuarios con el contenido que se desea transmitir. Nos permiten ponernos en los zapatos del otro, tomar decisiones, producir resultados y generar empatía con un contexto diferente al propio”, expresó.

Sin embargo, para Echeverri todavía queda mucho por explotar en materia de videojuegos para la paz. “La realidad virtual, por ejemplo, puede ser muy efectiva porque por medio de la inmersión podemos hacer que los usuarios sientan que están experimentando la vida de otra persona”, concluyó.

Nina Cabra, decana de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Central, considera que es muy importante que “los juegos educativos tengan una estética atractiva, ya que los jugadores son muy exigentes con esto. De lo contrario, el aprendizaje puede ser tedioso”.

Aprender de leyes mientras se juega
¿Cómo hacer que las víctimas de la violencia quieran conocer la ley (1448 de 2011) que habla de las medidas de atención, asistencia y reparación integral? En el grupo de desarrolladores Anglus consideraron que un juego podría ser una herramienta útil, teniendo en cuenta sus ventajas interactivas. Por eso diseñaron un juego llamado Vitimalz, inspirado en el título Plantas vs. zombis, que tiene como objetivo evitar que una casa sea atacada por los enemigos, llamados ‘vitimalz’. Para lograrlo, los jugadores deben contestar una serie de preguntas relacionadas con la ley. Por cada respuesta acertada, el usuario irá recolectando ‘sonrisas’, que activarán los demás niveles.
Paz a la Voz, un juego que involucra a los niños de la guerra
Informar a los niños víctimas del conflicto sobre sus derechos es la idea principal del videojuego Paz a la Voz. El reto de Medea, empresa encargada de su diseño, fue ponerse en los zapatos de los menores que vivieron de cerca la guerra en el país. Así las cosas, la misión de la compañía consistió en crear un videojuego que explicara, por medio de animaciones, el protocolo de participación que recogió las observaciones y sugerencias de las víctimas. 

En diálogo con EL TIEMPO, Ana Echeverri, una de las creadoras del proyecto, dijo que el juego es una herramienta útil para que los niños se involucren en los procesos que enfrentan las víctimas. “Los retos, puntos, ranking, premios, escenarios y personajes hacen que los videojuegos sean un excelente canal para aprender de una forma más efectiva, divertida y medible”, advirtió.

¿Ir o no a la guerra?
Reconstrucción es un videojuego de rol cuyo personaje principal es una mujer colombiana que debe decidir si evade o no la guerra. Durante el juego, Victoria se enfrenta a diferentes situaciones inspiradas en la vida real, como enfrentarse a la opción de ingresar a un grupo armado.

El título fue desarrollado por el Vivelab, de la Universidad Nacional, que se apoyó en las historias recopiladas por el Centro Nacional de Memoria Histórica. 

“Reconstrucción se hizo para que los jóvenes de últimos grados de colegio exploren lo que ha sido el conflicto en el país”, dijo Álvaro Triana, productor del videojuego. El producto ya fue puesto a prueba con estudiantes de varias partes del país, y durante el proceso los desarrolladores evidenciaron diferencias en el modo de interacción de los estudiantes en las zonas rurales y urbanas. “Por ejemplo, en Guaviare los niños habían vivido muy de cerca la guerra, así que al jugar era como si se enfrentaran a situaciones de su vida. En zonas urbanas veían la guerra como algo lejano”, dijo Triana.


fuente: eltiempo.com/tecnosfera
             Maria Fernanda Cardona
             (Escuela de Periodismo Multimedia)